
Orunmìlà era muy exitoso y un altamente realizado Bàbálawo. Tenía varios clientes quienes se atendían con él usualmente todos los días. Pronto llegó al punto en que no podía con todas las tareas diarias por sí mismo. Por lo tanto, decidió ir a comprar un esclavo quien estaría asistiendo en sus actividades diarias.
Antes de ir al mercado de esclavos, él reunió a sus dos estudiantes mencionados anteriormente para consultar a Ifá ante las siguientes interrogantes:
¿Sería sabio para él comprar un esclavo en ese momento? ¿Sería el esclavo de beneficio para él?
Los Awo le dijeron a Orunmìlà que él estaba a punto de ir y gastar dinero en algo que él deseaba mejorar en el funcionamiento de las actividades de su negocio. Le indicaron que fuera adelante y hacerlo, ya que esto le ayudaría grandemente y le abriría los ojos a otros aspectos tecnológicos de su trabajo. Le dijeron que ofreciera sacrificio con tres palomas, tres gallinas, tres guineas y dinero. Orunmìlà obedeció y se puso en camino para el mercado Ejigbomekun.
En el mercado, él vio a Òsányin en cadenas. Él había sido traído al mercado para ser vendido como esclavo. Orunmìlà decidió comprarlo porque ellos estaban emparentados y eran colegas desde Orun. Ellos regatearon sobre el precio y eventualmente, él compró a Òsányin y lo trajo a casa.
En su camino a casa, él le explicó todo lo que tenía en mente antes de que decidiera ir al mercado de Ejigbomekun a comprar a un esclavo.
Òsányin le dijo a Orunmìlà que estaría listo para asistirlo en su trabajo y que estaría para siempre agradecido de que fue él quien lo compró como esclavo y no otra persona.
Al siguiente día Orunmìlà quiso salir. Él instruyó a Òsányin para que limpiara la hierbas en su patio para que así las serpientes y otros reptiles no se estuviesen metiendo dentro de la casa.
Cuando Orunmìlà regresó a casa, encontró, para su completa sorpresa, el patio casi completo sin tocar. Entonces convocó a Òsányin para averiguar por qué había fallado en llevar a cabo sus instrucciones.
Òsányin le respondió que él no había visto ninguna hierba que limpiar porque todos los arbustos y hierbas que él había encontrado en el patio de Orunmìlà eran de significado espiritual, medicinal u oculto. Ante el argumento de Òsányin, Orunmìlà le pidió que argumentara sobre sus declaraciones.
Òsányin fue con Orunmìlà a su patio y comenzó a señalar, uno por uno, todos los arbustos y hierbas y raíces allí y entonces le dijo su significado. Òsányin dijo:
Esta planta es para adquirir la prosperidad. ¿Quién la cortaría?
Inmediatamente él apuntó a otra planta y dijo:
Esta planta es para adquirir buenas esposas. ¿Quién la cortaría?
Él apuntó a otra más y dijo:
Esta planta es para lograr tener hijos. ¿Quién la cortaría?
Él apuntó aun a otra más y dijo:
Esta planta es para tener buena salud. ¿Quién la cortaría?
Él continuó y continuó hasta que se movió por todo el patio. No hubo hierba o arbusto que no fuera útil para algo.
Hasta ahora, Orunmìlà jamás había empleado el uso de esas hierbas, hojas, raíces o arbustos en su trabajo. Él había estado usando solamente Ìyèrósùn y encantamientos para hacer su trabajo. Él entonces razonó de que no solo sería posible y practicable combinar las hierbas y las raíces con la permitida encantación en su trabajo, trabajaría igualmente útil y sería más efectivo.
A la luz de esta sabiduría, Orunmìlà convirtió a Òsányin de esclavo a socio de negocios. Òsányin comenzó entonces a preparar hierbas y raíces para varias dolencias mientras que Orunmìlà recitaría encantaciones para hacerlas más efectivas que antes. El resultado fue increíble. No solo mejoró la eficacia del trabajo de Orunmìlà, igualmente lo alzó en la sociedad. Este logro trajo como resultado de la introducción de Òsányin a las hierbas y raíces a Orunmìlà.
Desde ese día hasta ahora, es difícil separar las hierbas y sus permitidas encantaciones. Cualquiera, sea él o ella, un Sacerdote o Sacerdotisa, herborista, ocultista y demás que combina las hierbas y raíces con la encantación simplemente está haciendo uso de los esfuerzos de Òsányin y Orunmìlà. Los dos estaban entonces muy contentos, cantando, bailando y alabando a Ifá y a Olódùmare por permitir su fortuito encuentro y hacer que todo esto sucediera para que sus conocimientos combinados hicieran sus preparados más efectivos para el beneficio de toda la humanidad.
Estamos en un mundo bendecido qué no sabemos aprovechar 🙏